Desde hace mucho tiempo fue evidente para Hans que era inmortal.
Se dio cuenta, luego de pasar los 21 años, que inexplicablemente dejó de envejecer. Esto preocupó mucho a Hans. «Si no envejezco, la gente me hará muchas preguntas. Querrán estudiarme y sentirán mucha envidia», pensaba.
Hans no quería exponerse a una situación tan problemática, por lo que decidió fingir envejecimiento mediante técnicas de maquillaje. Así, su condición pasó desapercibida por mucho tiempo.
Con el pasar de muchos años, forzosamente, también le tocó fingir su muerte. Mediante técnicas de farmacología vudú preparó una poderosa poción que ralentizó su metabolismo, a tal punto que pareció clínicamente muerto. Aprovechó ese estado para dormir bajo tierra durante un par de generaciones. De esa manera, al despertar, no lo reconocerían.
Pasado ese tiempo, Hans reaccionó, despertó de su letargo y se levantó para empezar una nueva vida, esperando repetir el proceso. Todo con tal de no tener que explicarle a nadie lo que, para él, era una bochornosa condición.
Copyright © Todos los derechos reservados
[…] parece sorprendente la habilidad de este humano. He investigado un poco, ellos llaman ‘Vudú‘ a aquel arte penado. Jamás había visto, fuera de los libros, el traspaso de información […]
Me gustaMe gusta